Gordon, el extraordinario Shiba Inu, ha tejido una inspiradora historia de triunfo sobre la adversidad a lo largo de sus 11 llenos de acontecimientos. Después de haber atravesado las desgarradoras consecuencias de un incidente de atropello y fuga en Taiwán, que lo dejó paralizado de cintura para abajo, el viaje de Gordon dio un giro inesperado cuando se encontró abrazado por los nuevos propietarios, Wendy Wickersham y Jim Larson, en los Estados Unidos. . Ahora, la conmovedora narrativa y el irresistible carisma de Gordon le han valido el prestigioso título de ganador del concurso PEOPLE’s World’s Cutest Rescue Dog Contest.
Un vistazo al perfil de Instagram de Gordon justifica rápidamente su galardón del primer lugar. Cada fotografía irradia su alegría y entusiasmo por la vida, y a menudo lo capturan en divertidas escapadas a través de parques verdes, acompañado de su pelota de gran tamaño. Wickersham compartió: “Inicialmente pensamos que le estábamos brindando nuestra ayuda, pero en realidad, ha inundado nuestras vidas con alegría y risas inconmensurables. Es una deuda que sentimos que nunca podremos pagar realmente”. Sin embargo, su estado actual de satisfacción lo alcanzó tras un minucioso proceso de adaptación a su nueva vida en Estados Unidos.
Wickersham recordó haber tropezado con el perfil de Gordon en medio de una serie de historias sombrías. A pesar de la tristeza, una fotografía se destacó: un Gordon radiante con una sonrisa contagiosa y tonta. A medida que los días se convirtieron en semanas, el recuerdo del entrañable perro persistió, obligándola a embarcarse en el complejo viaje de adopción. Este camino, plagado de desafíos debido a la distancia geográfica (Gordon residía en Taiwán) y sus limitaciones físicas, duró varios meses.
Tanto a Wickersham como a Larson les esperaba una serie de ajustes, que iban desde modernizar su residencia para que fuera accesible en silla de ruedas hasta presentar a su perro actual, Yuki (que desde entonces cruzó el puente del arcoíris), y la perspectiva de un nuevo miembro de la familia. Finalmente, en noviembre de 2015, Gordon encontró su refugio para siempre dentro de su casa. Wickersham reflexionó: “No puedo determinar quién estaba más aprensivo en ese momento: Gordon o yo”. Gradualmente, con mucha paciencia y un estímulo inquebrantable, Gordon se adaptó a su nuevo entorno y se convirtió en la encantadora personalidad canina que encarna hoy.
Gordon eclipsó a más de 9.000 contendientes y emergió como el vencedor del perro de rescate más lindo del mundo. Su triunfo le valió un suministro de comida para perros de primera calidad para un año, junto con una importante contribución de 1.000 dólares a una organización de rescate de animales elegida por Wickersham.
Para aquellos cautivados por el cautivador viaje de Gordon, un viaje virtual a su mundo está a solo un clic de distancia. Su cuenta de Instagram promete una variedad de instantáneas conmovedoras que ofrecen una ventana a su adorable vida.